Con fecha 8 de noviembre de 2022, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (en adelante, el Tribunal) dictó una sentencia en el asunto 57906/18 Veres contra España, (en adelante Asunto Veres contra España) en la que condenaba a España por el excesivo retraso, por parte de los tribunales españoles, en reconocer y ejecutar una decisión dictada en Hungría en la que se ordenaba a la ex esposa del demandante regresar a Hungría junto a su hija, con la que se había trasladado a España.
El Tribunal consideró que el periodo de más de dos años que tardaron los tribunales españoles en reconocer y ejecutar la decisión húngara constituía una dilación excesiva atribuible de forma esencial a los tribunales españoles que no habían adoptado medidas suficientes y adecuadas para ejecutar la decisión húngara.
Este retraso, en opinión del Tribunal, tuvo serias consecuencias para el demandante y su hija ya que aparte de la interrupción de sus relaciones paternofiliales durante dos años, había influido en la decisión de los tribunales húngaros que otorgaron la custodia a la madre de la menor, al considerar que el transcurso del tiempo había reforzado los lazos entre ambas y debilitado la conexión de la hija con el padre.
Por todo ello el Tribunal condenó a España a la luz del artículo 8 del Convenio Europeo de Derechos Humanos (derecho a la vida privada y familiar).
Tras un breve resumen de los hechos que dieron lugar a la sentencia, el área procesal internacional de la Unidad Técnica Jurídica ha elaborado un monográfico sobre Ejecución en España de resoluciones de la Unión en materia de responsabilidad parental, en el que se analizan los instrumentos jurídicos que utilizó el demandante para lograr el reconocimiento y ejecución de la decisión húngara contenidos en el Reglamento CE) nº 2201/2003 del Consejo, de 27 de noviembre de 2003, relativo a la competencia, el reconocimiento y la ejecución de resoluciones judiciales en materia matrimonial y de responsabilidad parental.
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