MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
El juez de la Audiencia Nacional Alejandro Abascal ha enviado al juzgado de Parla la investigación sobre el teniente coronel de la Guardia Civil David Oliva –exjefe Antidroga para El Estrecho de Gibraltar– y otros dos agentes de la Benemérita por presuntos delitos de revelación de secretos y cohecho.
En un auto, recogido por Europa Press, el responsable del Juzgado Central de Instrucción Número 1 ha acordado inhibirse en favor del Juzgado Decano de Parla al haberse archivado la pieza principal de este procedimiento, una causa que la Fiscalía Antidroga llevaba en secreto. Por ello, subraya, ha «desaparecido el nexo» que hacía que la pieza separada fuese competencia de la Audiencia Nacional.
«Nos encontramos ante la presencia de un presunto delito de revelación de secretos en relación de concurso medial con un delito de cohecho. Tal y como expone el Ministerio Fiscal, para consumar el delito de cohecho, el momento inicial de la acción delictiva hay que situarlo en la sustracción de los secretos e información reservada que posteriormente fueron entregados como dádiva que integra ese delito de cohecho», explica el magistrado.
En este contexto, el juez indica que «esa sustracción, se produjo en la sede del Servicio de Asuntos Internos de la Guardia Civil, radicada en Pinto (Madrid), perteneciente al Partido Judicial de Parla».
El instructor ha tomado esta decisión después de que la Fiscalía Antidroga le instase al archivo de la causa que originó la investigación contra el teniente coronel de la Guardia Civil y otros dos agentes de la Benemérita. El Ministerio Público también solicitó al magistrado que enviase la pieza separada a un juzgado ordinario.
SUPUESTAS PRESIONES
Fuentes del caso señalan que Oliva está investigado por presuntamente haber presionado a un subordinado y al otro teniente para saber si se investigaba su presencia en una fiesta del ‘narco’.
Oliva habría presionado a los dos tenientes para saber si Asuntos Internos le estaba investigando por asistir a una fiesta del ‘narco’, unas pesquisas que, según las citadas fuentes, no se estaban llevando a cabo.
No obstante, Asuntos Internos sí advirtió esas presuntas presiones y le empezó a investigar por eso. También dirigió sus pesquisas contra los otros dos tenientes, igualmente por ambos delitos.
ENTREGAN DISPOSITIVOS
El delito de revelación de secretos se le imputa por tratar de obtener dicha información y el de cohecho por garantizar a ese teniente, que finalmente sí le habría facilitado algún tipo de información, que pasaría de Asuntos Internos a Antidroga.
Las presiones se habrían producido durante su etapa como jefe del Organismo de Coordinación del Narcotráfico Sur (OCON), creado a mediados de 2018 como unidad puntera en la lucha antidroga y desmantelado el pasado septiembre por el Ministerio que dirige Fernando Grande-Marlaska.
El juez acordó el pasado 12 de abril dejar en libertad pero con la obligación de comparecer mensualmente tanto a Oliva como a los dos agentes. Esa decisión, tomada a instancias de Antidroga, llegó después de escuchar durante varias horas la versión de los tres investigados.
